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El uso de parábolas en la enseñanza de Jesús

Discurso #3

Esta lección examinará las razones por las que Jesús utilizó parábolas en su ministerio de enseñanza y qué reglas debemos seguir para comprender su significado original y cómo extraer aplicaciones de ellas hoy.
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En la narrativa anterior vimos el rechazo de Jesús y Sus enseñanzas por los líderes religiosos y la mayoría del pueblo.

En la próxima sección encontraremos al Señor usando parábolas para enseñar a las multitudes que lo siguieron. Mateo explica que Jesús lo hizo así para poder seguir instruyendo a Sus discípulos pero a la vez mantener escondidas las cosas del reino de los incrédulos que lo habían rechazado. La parábola es el formato perfecto para lograr este doble propósito.

Las parábolas

La palabra "parábola" significa poner al lado de. Significaba poner dos o más objetos el uno al lado del otro para poder compararlos. En el Nuevo Testamento, las cosas "vistas" se ponen al lado de cosas "no vistas" para revelar una verdad. Era una buena herramienta pedagógica porque era fácil de entender aún por personas sin educación y era más probable que se recordara.

En la mayoría de los casos una parábola usa un cuento imaginario de algo que podría haber ocurrido en la realidad pero se usa figurativamente para ilustrar una verdad espiritual. Las parábolas no son fábulas o mitos porque las lecciones se encajan en cuentos que pudieron haber ocurrido (sin hadas o misticismo).

La parábola no es un recurso literario inventado por Jesús (2 Samuel 12:1-7, Natán le cuenta la parábola de la oveja a David) pero Jesús toma prestado el recurso literario y le da un significado especial. En el Nuevo Testamento solo Jesús usa parábolas y estos se registran solamente en los evangelios de Mateo, Marcos y Lucas (Juan tiene figuras, "Yo soy la vid", pero no parábolas). Algunas de ellas se encuentran en más de un evangelio y muchas son exclusivas en uno solo (p. ej. Mateo, La perla costosa / Lucas, El buen samaritano).

Para poder extraer lecciones certeras de las parábolas hay que seguir unas reglas básicas:

  1. Busque la verdad espiritual que se aplica a la situación que motivó la parábola en primera instancia:
    1. p. ej. Jesús contó la parábola del hijo pródigo porque los fariseos estaban murmurando contra Jesús por comer con pecadores. Para interpretar la parábola correctamente se tienen que aplicar las palabras de Jesús a esa situación.
  2. Evite la simplificación o complicación excesiva. No busques que cada detalle tenga un significado específico y no interpretes demasiado. Busque más bien el principio espiritual general expuesto.
    1. Decir que la parábola del Buen samaritano enseña que hacer el bien a otros es el punto del cristianismo es una simplificación excesiva (ignora la cruz de Cristo, etc.)
    2. Buscar que se nos indique cómo debemos operar económicamente de la parábola del amo que pagó sus obreros el mismo pago por diferentes horas de trabajo (Mateo 20:1-7) es una complicación excesiva.
  3. Las parábolas ilustran una verdad (tal como los dibujos en un libro de texto ilustran el texto) pero no comprueban la verdad. No debemos formular doctrinas basadas solamente en parábolas.
    1. Necesitamos recordar que las parábolas no son afirmaciones doctrinales. Son maneras figurativas de señalar cosas invisibles.
    2. Es el poner una historia con cosas concretas (visibles) al lado de cosas espirituales (invisibles) para que por medio de lo visto, lo que no se ve sea más claro.
    3. Usualmente señalan una verdad que se puede encontrar escrito en algún lugar. Por ejemplo, la parábola del Buen Samaritano ilustra amor hacia el prójimo y quién es el prójimo. En Lucas 10:27 Jesús cita escrituras del Antiguo Testamento para decirlo claramente. En este caso la parábola ilustró la idea pero no nació de ella.
  4. Busque el significado o la conclusión dentro de la parábola misma o en el contexto antes de sacar tu propia conclusión.
    1. A veces Jesús da el significado al principio o al final (El rico necio en Lucas 12:16-21). A veces pide a otro que dé el significado (el buen samaritano en Lucas 10:25-37). A veces responde a una pregunta de alguien en el grupo que escuchó la parábola. (Pedro pregunta cómo lo que entra por la boca del hombre no lo contamina). A veces deja que la gente saque sus propias conclusiones (Marcos 12:12 muestra que los líderes religiosos sacaron la conclusión correcta de la parábola de los siervos malvados que golpean y matan al hijo del amo al entender que trataba de ellos mismos).
    2. Generalmente el significado principal se encuentra dentro de la parábola y es aplicable a la situación en que se contó la parábola.
  5. Jesús y Sus parábolas son uno.
    1. Otros maestros y moralistas pueden separarse de sus enseñanzas porque sus ilustraciones no se tratan sobre ellos mismos. No así con Jesús. Sus parábolas tratan temas de Él y Su reino. La razón por la cual las personas no entendían las parábolas es porque no lo aceptaban como el Mesías, y por esa razón no podían comprender el significado completo de Sus parábolas.
    2. Los contó de tal manera que al rechazarlo a Él se negaron a entender las enseñanzas sobre el reino que se encontraban en las parábolas.

Parábolas sobre el reino

Mateo 13 contiene siete parábolas sobre el reino (uno implícito y seis explícitos), y una pequeña parábola sobre los discípulos al final del capítulo. Muchas de las parábolas de Jesús trataban del reino - su naturaleza, su venida, su valor, etc.

Las interpretaciones de estas han variado a través de los años dependiendo de las posiciones teológicas creídas. Un punto de vista extremo indica que el reino vendrá de repente y catastróficamente en el futuro. Esta posición interpreta todas las parábolas que tratan el reino desde esta perspectiva (i.e. la levadura que de repente fermenta la harina es una ilustración de que el reino vendrá de repente). El otro extremo dice que el reino se ha establecido y realizado completamente aquí ahora y que solo estamos añadiendo a él con el paso del tiempo (i.e. la fermentación de la levadura se interpreta como el crecimiento constante del reino).

Una interpretación moderada, y en mi opinión más bíblica dice que el reino ha sido establecido por Cristo aquí en la tierra pero se llevará a su cumplimiento (resurrección y glorificación) cuando Él vuelva (ej. Cristo es la levadura, la obra de los santos es el crecimiento, y el resultado final es Su retorno). Las parábolas del reino demuestran el comportamiento de quienes viven y se desarrollan dentro del reino hasta que vuelva el Rey.

Parábolas en Mateo 13

En Mateo 13 vemos siete parábolas del reino y una explicación de por qué usa parábolas junto con ejemplos de la mayoría de los recursos en cuanto a las parábolas mencionadas en este capítulo.

Jesús cuenta la parábola del sembrador y la semilla como respuesta al ser rechazado por los líderes y el pueblo

1Ese mismo día salió Jesús de la casa y se sentó a la orilla del mar. 2Y se congregaron junto a Él grandes multitudes, por lo que subió a una barca y se sentó; y toda la multitud estaba de pie en la playa. 3Y les habló muchas cosas en parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a sembrar; 4y al sembrar, parte de la semilla cayó junto al camino, y vinieron las aves y se la comieron. 5Otra parte cayó en pedregales donde no tenía mucha tierra; y enseguida brotó porque no tenía profundidad de tierra; 6pero cuando salió el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó. 7Otra parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron y la ahogaron. 8Y otra parte cayó en tierra buena y dio fruto, algunas semillas a ciento por uno, otras a sesenta y otras a treinta. 9El que tiene oídos, que oiga.

La explicación de por qué ahora usará parábolas

10Y acercándose los discípulos, le dijeron: ¿Por qué les hablas en parábolas? 11Y respondiendo Él, les dijo: Porque a vosotros se os ha concedido conocer los misterios del reino de los cielos, pero a ellos no se les ha concedido. 12Porque a cualquiera que tiene, se le dará más, y tendrá en abundancia; pero a cualquiera que no tiene, aun lo que tiene se le quitará. 13Por eso les hablo en parábolas; porque viendo no ven, y oyendo no oyen ni entienden. 14Y en ellos se cumple la profecía de Isaías que dice: «Al oír oiréis, y no entenderéis; y viendo veréis, y no percibiréis; 15porque el corazón de este pueblo se ha vuelto insensible y con dificultad oyen con sus oídos; y sus ojos han cerrado, no sea que vean con los ojos, y oigan con los oídos, y entiendan con el corazón, y se conviertan, y yo los sane». 16Pero dichosos vuestros ojos, porque ven, y vuestros oídos, porque oyen. 17Porque en verdad os digo que muchos profetas y justos desearon ver lo que vosotros veis, y no lo vieron; y oír lo que vosotros oís, y no lo oyeron.

Usa las parábolas para enseñar a los discípulos y para distinguir entre los creyentes y los no creyentes. Tanto el uso de y la razón por las parábolas fueron profetizados.

Ejemplo de cómo explica una parábola a los discípulos (también nos da el comentario correcto sobre la parábola dentro del texto)

18Vosotros, pues, escuchad la parábola del sembrador. 19A todo el que oye la palabra del reino y no la entiende, el maligno viene y arrebata lo que fue sembrado en su corazón. Este es aquel en quien se sembró la semilla junto al camino. 20Y aquel en quien se sembró la semilla en pedregales, este es el que oye la palabra y enseguida la recibe con gozo; 21pero no tiene raíz profunda en sí mismo, sino que solo es temporal, y cuando por causa de la palabra viene la aflicción o la persecución, enseguida tropieza y cae. 22Y aquel en quien se sembró la semilla entre espinos, este es el que oye la palabra, mas las preocupaciones del mundo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se queda sin fruto. 23Pero aquel en quien se sembró la semilla en tierra buena, este es el que oye la palabra y la entiende, este sí da fruto y produce, uno a ciento, otro a sesenta y otro a treinta.

La parábolas del reino restantes se dividen en dos grupos de tres separados por dos afirmaciones y seguido por un resumen:

Parábolas

El trigo y la cizaña

24Jesús les refirió otra parábola, diciendo: El reino de los cielos puede compararse a un hombre que sembró buena semilla en su campo. 25Pero mientras los hombres dormían, vino su enemigo y sembró cizaña entre el trigo, y se fue. 26Cuando el trigo brotó y produjo grano, entonces apareció también la cizaña. 27Y los siervos del dueño fueron y le dijeron: «Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿Cómo, pues, tiene cizaña?». 28Él les dijo: «Un enemigo ha hecho esto». Y los siervos le dijeron: «¿Quieres, pues, que vayamos y la recojamos?». 29Pero él dijo: «No, no sea que al recoger la cizaña, arranquéis el trigo junto con ella. 30Dejad que ambos crezcan juntos hasta la siega; y al tiempo de la siega diré a los segadores: "Recoged primero la cizaña y atadla en manojos para quemarla, pero el trigo recogedlo en mi granero"».

Parábola del grano de mostaza

31Les refirió otra parábola, diciendo: El reino de los cielos es semejante a un grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo, 32y que de todas las semillas es la más pequeña; pero cuando ha crecido, es la mayor de las hortalizas, y se hace árbol, de modo que las aves del cielo vienen y anidan en sus ramas.

Parábola de la levadura

33Les dijo otra parábola: El reino de los cielos es semejante a la levadura que una mujer tomó y escondió en tres medidas de harina hasta que todo quedó fermentado.

Una afirmación parentética que el uso de las parábolas es de acuerdo con las profecías

34Todo esto habló Jesús en parábolas a las multitudes, y nada les hablaba sin parábola, 35para que se cumpliera lo dicho por medio del profeta, cuando dijo: Abriré mi boca en parábolas; hablare de cosas ocultas desde la fundación del mundo.

Explicación de la parábola del trigo y la cizaña en respuesta a la pregunta de los discípulos

36Entonces dejó a la multitud y entró en la casa. Y se le acercaron sus discípulos, diciendo: Explícanos la parábola de la cizaña del campo. 37Y respondiendo Él, dijo: El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre, 38y el campo es el mundo; y la buena semilla son los hijos del reino, y la cizaña son los hijos del maligno; 39y el enemigo que la sembró es el diablo, y la siega es el fin del mundo, y los segadores son los ángeles. 40Por tanto, así como la cizaña se recoge y se quema en el fuego, de la misma manera será en el fin del mundo. 41El Hijo del Hombre enviará a sus ángeles, y recogerán de su reino a todos los que son piedra de tropiezo y a los que hacen iniquidad; 42y los echarán en el horno de fuego; allí será el llanto y el crujir de dientes. 43Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre. El que tiene oídos, que oiga.

Parábolas

Tesoro

44El reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en el campo, que al encontrarlo un hombre, lo vuelve a esconder, y de alegría por ello, va, vende todo lo que tiene y compra aquel campo.

Paz

45El reino de los cielos también es semejante a un mercader que busca perlas finas, 46y al encontrar una perla de gran valor, fue y vendió todo lo que tenía y la compró.

Red barredera

47El reino de los cielos también es semejante a una red barredera que se echó en el mar, y recogió peces de toda clase; 48y cuando se llenó, la sacaron a la playa; y se sentaron y recogieron los peces buenos en canastas, pero echaron fuera los malos. 49Así será en el fin del mundo; los ángeles saldrán, y sacarán a los malos de entre los justos, 50y los arrojarán en el horno de fuego; allí será el llanto y el crujir de dientes.

Resumen

51¿Habéis entendido todas estas cosas? Ellos le dijeron: Sí. 52Y Él les dijo: Por eso todo escriba que se ha convertido en un discípulo del reino de los cielos es semejante al dueño de casa que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas.

Les pregunta si entienden las parábolas y dicen que sí las entienden. Él responde con otra parábola, esta vez los compara con un jefe de familia (cuyo responsabilidad era proveer para las necesidades del hogar).

Al proveer lo que les ha sido dado y enseñado y lo que verán y aprenderán, ellos eran los proveedores de la casa (el reino). Algunas eran verdades antiguas, cosas conocidas y aceptadas (la Ley y los profetas). Algunas eran verdades nuevas que habían aprendido de Jesús quien enseñaba mediante parábolas (el evangelio, la muerte, sepultura y resurrección). Si han aprendido y entendido lo que Él les ha enseñado verán cómo se conecta lo antiguo con lo nuevo (el antiguo señala lo nuevo, lo nuevo cumple lo antiguo) y así podrán alimentar y enseñar a aquellos que están en el reino y a quienes están buscando el reino.

Tarea

He aquí un proyecto personal si quieres un desafío en el estudio bíblico.

  1. Elija dos parábolas de esta sección.
  2. Conteste las siguientes preguntas:
    1. ¿Cuál es la verdad principal?
    2. ¿Qué significaba para los discípulos?
    3. ¿Qué significa para nosotros hoy día?
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