Directrices para presentaciones de conferencias

Guía por:
Topic
6 of 8
EnglishFrançaisEspañol

La conferencia es una técnica habitual en la mayoría de las presentaciones bíblicas. Puede ser una presentación formal y unidireccional o una presentación informal en la que se fomentan las preguntas. Una conferencia eficaz no se limita a presentar un lote de información en un lugar y a una hora determinados. La siguiente información se proporciona para ayudar a desarrollar y presentar conferencias que atraigan a los alumnos.

Preparación

La preparación de una conferencia, como de cualquier otra presentación, es fundamental para la excelencia. Cuanto mejor sea la preparación, mejor será la presentación y mejores los resultados. Hay que centrarse en:

  • Desarrollar una lección centrada en los resultados de aprendizaje deseados.
  • Crear un esquema de puntos principales y subpuntos que incluya apoyo gráfico y ejemplos.
  • Practicar la presentación y, si es posible, practicar en el área de impartición.

Manténgase centrado

Con la práctica mejorará su presentación. Aquí tienes algunas técnicas para mejorar tu conferencia:

  • Limite el número de puntos clave a 3 ó 4, en función del alcance y la complejidad de la lección. Si se necesitan más puntos, determine un punto de ruptura lógico y cubra el material adicional en una clase posterior.
  • Elabore y comparta un esquema o una guía para tomar apuntes con los estudiantes.
  • Exponga sus objetivos y puntos clave al principio de la clase. Esto también ayuda a los alumnos a mantener la concentración.

Técnicas de presentación

Con la práctica mejorará su presentación. Aquí tienes algunas técnicas para mejorar tu conferencia:

  • Evite leer la lección. Hay ocasiones en las que se leen notas y textos, pero deben reducirse al mínimo.
  • Capte la atención de los alumnos, pero no mantenga el contacto visual durante más de 4 ó 5 segundos. Es aceptable mantener el contacto visual con un alumno que hace una pregunta, pero continuar con el contacto general si la respuesta es más compleja que una respuesta rápida.
  • Si los alumnos están anotando un punto clave, déles tiempo para que lo escriban.
  • ¡Practique, practique, practique!

Atraer a los estudiantes

Capte la atención del alumno utilizando una cita, un vídeo, una historia u otro material similar que sea relevante para el tema. Esto no sólo llama la atención, sino que constituye la base de los puntos principales.

Incorpore materiales que respondan a diversos estilos de aprendizaje. La mayoría de los alumnos aprenden visualmente, por lo que conviene integrar ayudas visuales y demostraciones.

Vincule el material nuevo a las conferencias presentadas anteriormente.

Mostrar relevancia para los estudiantes. La mayoría de los estudiantes adultos buscan la relevancia del material para sus necesidades de aprendizaje.

Muéstrate entusiasmado con tu tema. No se limite a hablar. Muéstrese relajado, varíe la inflexión de la voz y el ritmo.

Dé tiempo a los alumnos para responder si les hace preguntas.

Tratamiento de las preguntas

Las clases son principalmente una comunicación unidireccional. Es aceptable permitir preguntas, pero limitándolas según convenga para que se puedan presentar los puntos clave y los alumnos no dominen la clase.

  • Haga saber a los alumnos que se admiten preguntas, sobre todo si el tema es complejo o se necesitan más aclaraciones.
  • Las preguntas son una forma de evaluar el aprendizaje de los alumnos, así que anímelos a hacerlas.
  • Si una pregunta no está relacionada con el tema, tome nota de la pregunta y dígale al alumno que le dará una respuesta personalmente o que la discutirá en otro momento.
  • Asegúrese de que entiende la pregunta del alumno antes de responder.
  • Mantén tu respuesta centrada en la pregunta y no te detengas demasiado en ella.
  • Es aceptable admitir que no sabes la respuesta o que necesitas investigar una respuesta para dar una respuesta mejor.
  • Considera la posibilidad de transmitir la pregunta a los alumnos para que formulen una respuesta general.
  • Considera la posibilidad de transmitir la pregunta de nuevo al alumno para preguntarle cuál cree que podría ser una respuesta aceptable.