La familia de Jacob

En el capítulo anterior vimos la historia de la bendición sin querer de Jacob por Isaac y los resultados de este acontecimiento.

• Esaú quiere matar a su hermano.
• Jacob tiene que salir para su propia protección y con la esperanza que encontrará una esposa entre los parientes de Rebeca.
• Se le reprocha a Isaac su rebeldía.

Ahora veremos de cerca a Jacob y los veinte años de su separación de su familia.

La bendición

¹Y llamó Isaac a Jacob, lo bendijo y le ordenó, diciendo: No tomarás mujer de entre las hijas de Canaán. ²Levántate, ve a Padán-aram, a casa de Betuel, padre de tu madre; y toma de allí mujer de entre las hijas de Labán, hermano de tu madre. ³Y el Dios Todopoderoso te bendiga, te haga fecundo y te multiplique, para que llegues a ser multitud de pueblos. ⁴Y te dé también la bendición de Abraham, a ti y a tu descendencia contigo, para que tomes posesión de la tierrade tus peregrinaciones, la que Dios dio a Abraham. ⁵Entonces Isaac despidió a Jacob, y este fue a Padán-aram, a casa de Labán, hijo de Betuel arameo, hermano de Rebeca, madre de Jacob y Esaú.
- Génesis 28:1-5

Una vez que Isaac se da cuenta de que había estado frustrando el plan de Dios con su terquedad, repite la bendición juntamente con unas instrucciones.

Anteriormente Jacob había recibido la bendición por engaño pero ahora la bendición es dada abiertamente, libremente y usando los términos más cercanos a los términos que se usaron en la bendición original a Abraham.

Observe también que Isaac le instruye a tomar una esposa de la casa de su madre (con la esperanza de encontrar una esposa creyente).

La reacción de Esaú

⁶Y vio Esaú que Isaac había bendecido a Jacob y lo había enviado a Padán-aram para tomar allí mujer para sí, y que cuando lo bendijo, le dio órdenes, diciendo: No tomarás para ti mujer de entre las hijas de Canaán, ⁷y que Jacob había obedecido a su padre y a su madre, y se había ido a Padán-aram. ⁸Vio, pues, Esaú que las hijas de Canaán no eran del agrado de su padre Isaac; ⁹y Esaú fue a Ismael, y tomó por mujer, además de las mujeres que ya tenía, a Mahalat, hija de Ismael, hijo de Abraham, hermana de Nebaiot.

Incluso vemos un poco de arrepentimiento de parte de Esaú. Viendo que sus esposas paganas preocupaban a sus padres y que la bendición ya era oficial y abiertamente de Jacob, va y se casa con alguien más adecuada y cercana a Isaac: la hija de Ismael (la hija de su tío, su sobrina). Por supuesto, esto es muy poco muy tarde pero indica que algunos de los eventos ocurridos también afectaron a Esaú.

La escalera de Jacob

¹⁰Y salió Jacob de Beerseba, y fue para Harán. ¹¹Y llegó a cierto lugar y pasó la noche allí, porque el sol se había puesto; tomó una de las piedras del lugar, la puso de cabecera y se acostó en aquel lugar. ¹²Y tuvo un sueño, y he aquí, había una escalera apoyada en la tierra cuyo extremo superior alcanzaba hasta el cielo; y he aquí, los ángeles de Dios subían y bajaban por ella. ¹³Y he aquí, el Señor estaba sobre ella, y dijo: Yo soy el Señor, el Dios de tu padre Abraham y el Dios de Isaac. La tierra en la que estás acostado te la daré a ti y a tu descendencia. ¹⁴También tu descendencia será como el polvo de la tierra, y te extenderás hacia el occidente y hacia el oriente, hacia el norte y hacia el sur; y en ti y en tu simiente serán bendecidas todas las familias de la tierra. ¹⁵He aquí, yo estoy contigo, y te guardaré por dondequiera que vayas y te haré volver a esta tierra; porque no te dejaré hasta que haya hecho lo que te he prometido.

Jacob está solo, no es un hombre de campo, jamás había estado fuera de casa y está huyendo de su hermano. Esta es la primera de 8 veces que Dios se le aparecerá a Jacob. Lo hace por medio de un sueño y reconfirma la bendición que le había sido pronunciado por su padre.

No habría duda en la mente de Jacob que a pesar de la mala manera en que obtuvo la bendición, era suya y seguiría siendo suya.

La imagen del soñador con una escalera (la única vez que se usa esta palabra) con ángeles ascendiendo y descendiendo sugiere y/o nos enseña varias cosas:

1. Existe un movimiento entre el mundo espiritual y el mundo físico.
2. La tarea de los ángeles es mover entre el cielo y la tierra para atender a quienes tienen parte en la promesa. Aprendemos detalles más específicos más adelante (2 Reyes 6:17; Daniel 9:21-23; Marcos 1:13; Lucas 22:43. etc.) pero esto es una indicación temprana de este fenómeno.
3. La escalera o vínculo entre los dos es Cristo.

Y le dijo: En verdad, en verdad os digo que veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subiendo y bajando sobre el Hijo del Hombre.
- Juan 1:51

La imagen aquí no aclara esto para Jacob pero más adelante en la Biblia Jesús lo usa para referirse a sí mismo.

Los ángeles atienden a los salvos por el poder de y de parte de Cristo quien es el vínculo entre el cielo y la tierra.

Jacob se despierta de su sueño (versículos 16-22) y hace varias cosas:

1. Erige una piedra para conmemorar el lugar donde Dios había salido a su encuentro en este sueño. Ofrece un sacrificio de aceite sobre ella. Más adelante volverá y construirá un altar (Génesis 35:3, 7).
2. Le pone al lugar el nombre de Betel que significa casa de Dios.
3. Hace un voto declarando que dará a Dios un diezmo de todo lo que tiene como muestra de su aprecio por el hecho que Dios es su Dios y provee por él.

Jacob y Labán – Capítulo 29

En los versículos 1-6, Jacob tiene como setenta y cinco años y en el capítulo 29 vemos que llega a su destino. Así como el siervo que encontró a su madre, Jacob llega a un pozo donde conoce a Raquel, una pastora, la hija de su tío Labán.

Al ver a Raquel (vv. 7-12) se emociona por reunirse con su familia. La besa (no románticamente sino como saludo) y se regocija al haberla encontrado. Ella corre a contar del encuentro a su familia.

¹³Y sucedió que cuando Labán oyó las noticias de Jacob, hijo de su hermana, corrió a su encuentro, lo abrazó, lo besó y lo trajo a su casa. Entonces él contó a Labán todas estas cosas. ¹⁴Y le dijo Labán: Ciertamente tú eres hueso mío y carne mía. Y Jacob se quedó con él todo un mes. ¹⁵Y Labán dijo a Jacob: ¿Acaso porque eres mi pariente has de servirme de balde? Hazme saber cuál será tu salario. ¹⁶Labán tenía dos hijas; el nombre de la mayor era Lea, y el nombre de la menor, Raquel. ¹⁷Y los ojos de Lea eran delicados, pero Raquel era de bella figura y de hermoso parecer. ¹⁸Y Jacob se había enamorado de Raquel, y dijo: Te serviré siete años por Raquel, tu hija menor. ¹⁹Y Labán dijo: Mejor es dártela a ti que dársela a otro hombre; quédate conmigo.
- Génesis 29:13-19

Jacob se encuentra con su tío y se hospeda con él. Labán le ofrece trabajo y Jacob ofrece trabajar siete años sin sueldo a cambio de contraer matrimonio con Raquel. Esto le convenía a Labán y como Jacob no tenía recursos esto sirvió para mostrar su amor y entrega a Raquel.

La Biblia dice que Raquel era hermosa de parecer y forma y que Lea era de "ojo delicado" (ojos débiles, no buenamoza, sensible de carácter).

²⁰Jacob, pues, sirvió siete años por Raquel, y le parecieron unos pocos días, por el amor que le tenía. ²¹Entonces Jacob dijo a Labán: Dame mi mujer, porque mi tiempo se ha cumplido para unirme a ella. ²²Y Labán reunió a todos los hombres del lugar, e hizo un banquete. ²³Y sucedió que al anochecer tomó a su hija Lea y se la trajo, y Jacob se llegó a ella. ²⁴Y Labán dio su sierva Zilpa a su hija Lea como sierva. ²⁵Cuando fue de mañana, he aquí que era Lea. Y Jacob dijo a Labán: ¿Qué es esto que me has hecho? ¿No fue por Raquel que te serví? ¿Por qué, pues, me has engañado? ²⁶Y Labán respondió: No se acostumbra en nuestro lugar dar a la menor antes que a la mayor. ²⁷Cumple la semana nupcial de esta, y te daremos también la otra por el servicio que habrás de rendirme aún otros siete años. ²⁸Así lo hizo Jacob, y cumplió la semana de ella; y él le dio a su hija Raquel por mujer. ²⁹Y Labán dio su sierva Bilha a su hija Raquel como sierva. ³⁰Y Jacob se llegó también a Raquel, y amó más a Raquel que a Lea; y sirvió a Labán durante otros siete años.

Es interesante notar que Labán no pretende cumplir su parte hasta que Jacob insiste en ello (debió haberle servido de advertencia). Jacob fue engañado de la misma manera que su padre.

• Cegado por el amor
• Vestida y perfumada para disfrazar a la persona actual (no se menciona pero es obvio)
• Contacto en la oscuridad después de un banquete (Isaac también comió y entonces dio la bendición).

Él confronta a Labán quien justifica sus acciones basado en la costumbre. Se le hace un acuerdo nuevo donde al cumplir la semana con Lea (para confirmar el matrimonio) Jacob puede tener a Raquel. Jacob acepta el nuevo acuerdo y a la semana consume su matrimonio con Raquel y se queda trabajando para Labán siete años más. Algunas cosas interesantes:

• Él amaba a Raquel más que a Lea pero sí amaba a Lea.
• Jacob pudo haber rechazado a Lea pero en lugar de eso la perdonó y la honró. Esto habla bien de su carácter.
• No se menciona pero seguramente Raquel también sufrió mucho porque también fue engañada.

Los hijos de Jacob

Los próximos versículos describen los nacimientos de los doce hijos de Jacob por medio de Lea, Raquel, y las siervas de ellas. Esto no se considera adulterio porque ambas mujeres eran legalmente sus esposas y también cualquier hijo nacido de sus siervas eran legalmente suyos de acuerdo con la costumbre del día.

Esto era poligamia y no está de acuerdo con el plan original de Dios dado en el huerto. Sin embargo, en los tiempos antes de Moisés Dios lo permitió. Esaú fue condenado por haberse casado con mujeres paganas no por tener dos esposas. Jacob no fue condenado y reprochado por sus muchas esposas. Sin embargo se nota lo poco natural que es a raíz de los problemas que surgen a causa de la poligamia.

³¹Vio el Señor que Lea era aborrecida, y le concedió hijos; pero Raquel era estéril. ³²Y concibió Lea y dio a luz un hijo, y le puso por nombre Rubén, pues dijo: Por cuanto el Señor ha visto mi aflicción, sin duda ahora mi marido me amará. ³³Concibió de nuevo y dio a luz un hijo, y dijo: Por cuanto el Señor ha oído que soy aborrecida, me ha dado también este hijo. Así que le puso por nombre Simeón. ³⁴Concibió otra vez y dio a luz un hijo, y dijo: Ahora esta vez mi marido se apegará a mí, porque le he dado tres hijos. Así que le puso por nombre Leví. ³⁵Concibió una vez más y dio a luz un hijo, y dijo: Esta vez alabaré al Señor; así que le puso por nombre Judá; y dejó de dar a luz.

Lea es odiada (en el sentido en que no es la favorita) y entonces Dios le permite concebir vez tras vez. Su fertilidad le otorga valor y su esposo se encariña con ella. Nombra a sus hijos para mostrar esto:

• Rubén – vea, un hijo
• Simeón – el que escucha
• Leví – adherido
• Judá – alabado

Vemos en su actitud y en los nombres que da a sus hijo que ella ama a Jacob, quiere que él esté con ella y que es una mujer espiritual quien tiene fe y confía en el Señor.

¹Pero viendo Raquel que ella no daba hijos a Jacob, tuvo celos de su hermana, y dijo a Jacob: Dame hijos, o si no, me muero. ²Entonces se encendió la ira de Jacob contra Raquel, y dijo: ¿Estoy yo en lugar de Dios, que te ha negado el fruto de tu vientre? ³Y ella dijo: Aquí está mi sierva Bilha; llégate a ella para que dé a luz sobre mis rodillas, para que por medio de ella yo también tenga hijos. ⁴Y le dio a su sierva Bilha por mujer, y Jacob se llegó a ella. ⁵Bilha concibió y dio a luz un hijo a Jacob. ⁶Y Raquel dijo: Dios me ha vindicado; ciertamente ha oído mi voz y me ha dado un hijo. Por tanto le puso por nombre Dan. ⁷Concibió otra vez Bilha, sierva de Raquel, y dio a luz un segundo hijo a Jacob. ⁸Y Raquel dijo: Con grandes luchas he luchado con mi hermana, y ciertamente he prevalecido. Y le puso por nombre Neftalí.
- Génesis 30:1-8

Raquel se pone celosa. Tenía que esperar que se casara su hermana y ahora su hermana tiene cuatro hijos ¡con el que originalmente era su esposo! Su pelea con su esposo termina con él diciendo que es Dios quien está cerrando su vientre y no él. Ella pone esto a prueba al darle su sierva (como lo había hecho Sara) para ver si Dios contestaría sus peticiones por un hijo.

• Dan – juzgado (ella es justificada)
• Neftalí – luchas (por su lucha con Lea)

⁹Viendo Lea que había dejado de dar a luz, tomó a su sierva Zilpa y la dio por mujer a Jacob. ¹⁰Y Zilpa, sierva de Lea, dio a luz un hijo a Jacob. ¹¹Y Lea dijo: ¡Cuán afortunada! Y le puso por nombre Gad. ¹²Después Zilpa, sierva de Lea, dio a luz un segundo hijo a Jacob. ¹³Y Lea dijo: Dichosa de mí; porque las mujeres me llamarán bienaventurada. Y le puso por nombre Aser.

Lea también usa este método para continuar proveyendo hijos a su esposo. Quizá la necesidad de producir hijos se sobrepuso a los celos de Raquel en cuanto a la relación de Jacob con estas otras mujeres. En todo caso era una manera de producir muchos hijos rápidamente lo que era una ventaja en aquellos tiempos.

Zilpa tiene dos hijos y Lea les pone Gad (fortuna) y Aser (dichoso) lo que refleja sus sentimientos acerca de estos hijos y esta situación.

¹⁴Fue Rubén en los días de la cosecha de trigo, y halló mandrágoras en el campo, y las trajo a su madre Lea. Entonces Raquel dijo a Lea: Dame, te ruego, de las mandrágoras de tu hijo. ¹⁵Pero ella le respondió: ¿Te parece poco haberme quitado el marido? ¿Me quitarás también las mandrágoras de mi hijo? Y Raquel dijo: Que él duerma, pues, contigo esta noche a cambio de las mandrágoras de tu hijo. ¹⁶Y cuando Jacob vino del campo por la tarde, Lea salió a su encuentro y le dijo: Debes llegarte a mí, porque ciertamente te he alquilado por las mandrágoras de mi hijo. Y él durmió con ella aquella noche. ¹⁷Escuchó Dios a Lea, y ella concibió, y dio a luz el quinto hijo a Jacob. ¹⁸Y Lea dijo: Dios me ha dado mi recompensa porque di mi sierva a mi marido. Y le puso por nombre Isacar. ¹⁹Concibió Lea otra vez y dio a luz el sexto hijo a Jacob. ²⁰Y Lea dijo: Dios me ha favorecido con una buena dote; ahora mi marido vivirá conmigo, porque le he dado seis hijos. Y le puso por nombre Zabulón. 21Después dio a luz una hija, y le puso por nombre Dina.

La mandrágora es una fruta tipo baya pequeña y de color naranjo. En la civilización antigua se consideraba un afrodisiaco y también se consideraba que inducía la fertilidad y la raíz se usaba como narcótico. (Conocida como la manzana de amor).

Rubén, hijo de Lea, encuentra unas mandrágoras y Raquel manda a Jacob a estar con Lea a cambio de ellas.

• Jacob estaba pasando más tiempo con Raquel y su sierva que con Lea.
• Raquel quería las mandrágoras para intentar quedar embarazada.
• Estaba dispuesta entregar Jacob a Lea ahora para intentar embarazarse después.

Jacob accede, Lea queda embarazada de su unión y le pone Isacar al hijo lo cual significa recompensa. Esto aviva el interés de Jacob por ella y concibe de nuevo, otro hijo Zabulón (habitación). Al poco tiempo nace una hija llamada Dina (justicia).

Muchos años después (vv. 22-24) Raquel finalmente da a luz a un hijo y lo llama José (significa quitar y añadir). Por fin se le quitó la vergüenza de su esterilidad y su nuevo hijo añadió gozo a su vida. Esto termina el registro de los nacimientos en la familia de Jacob hasta ahora. Faltan un hijo y otras hijas por nacer.

Lecciones

1. A Dios le importan tus problemas

• Jacob estaba solo e inseguro, Dios se le apareció personalmente para reconfirmar la bendición.
• Lea no era amada y estaba sola, Dios le dio hijos.
• Raquel se sentía engañada y avergonzada, dio a luz a José.

A Dios le importan tus problemas, y no hay problema demasiado difícil, demasiado pequeño, o demasiado humano para que se interese, se involucre y obre en él.

2. El dar es parte del agradecimiento

La reacción de Jacob a la aparición de Dios no era solamente de adoración y oración sino dedicó una décima parte de todo lo que tenía a Dios como señal de su gratitud. No había una ley que requería esto. Era simplemente la reacción natural de un corazón contento y agradecido. No hay un agradecimiento real si no hay una ofrenda, y por eso "la ofrenda" es parte de la adoración. Lo que ponemos en la ofrenda durante el culto de adoración indica cuán sincera es nuestra alabanza.

3. A mal tiempo, buena cara

En la historia de Jacob encontramos a personas normales enfrentando situaciones extraordinarias causadas por sus propios pecados o los pecados de otros.

• Jacob y Raquel fueron privados de su noche de bodas.
• Lea aguantó un matrimonio humillante.
• Jacob trabajó siete años adicionales para su suegro.
• Tuvieron una extraña familia mixta.

No permitieron que una sola cosa mala o una inconveniencia les destruyera. Todos tenían fe en Dios (observe que cada uno estaba en competencia y conflicto el uno con el otro pero continuamente clamaban a Dios individualmente). El pueblo de Dios pone buena cara al mal tiempo sabiendo que el objetivo no es ganar cada ronda sino terminar la pelea. Por medio de Cristo podemos poner al mal tiempo, buena cara y terminar victoriosos al final.